lunes, 12 de junio de 2017

Éxito en exámenes finales.





 No hay texto alternativo automático disponible.



 Éxito en exámenes finales 

La tensión que se vive al acercarse los exámenes finales es para algunos estudiantes un momento más crítico que para otros, sin embargo, aquí os mostraremos cómo canalizar la energía para conseguir más seguridad y así poder salir victoriosos; Hablaremos acerca de un pequeño ritual y os obsequiaremos un maravilloso mantra de conexión con nuestro Chakra ligado a la concentración.

                Cuando hablamos de exámenes nos referimos a cualquier evaluación que tenga la persona en cualquier faceta de la vida (oposiciones, puestos de empleo…), ya sabe “una cosa es aprobar y otra cosa es ir preparado para aprobar…”. Como en todos los aspectos, es algo muy personal y subjetivo el desarrollo de cada persona en su vida académica, ya que hay personas que no se sienten a gusto estudiando o que les resulta muy complicado alcanzar la concentración requerida para sentirse preparado y alcanzar el éxito en los exámenes.

                Debemos tener claro que inicialmente tenemos que hacer el esfuerzo de adecuar nuestra mente y nuestro estado corporal al hábito del estudio, de esta forma será más fácil prepararnos para la apertura del campo energético de nuestro sexto Chakra, y también ser receptivos a las energías positivas que alberguen en este momento. “…Para aprender a estudiar, hay que hacer varios ejercicios…” 

           



   El sexto Chakra llamado “Anja” se ubica en el centro de nuestra frente (en el entrecejo) y es el chakra de la concentración. Cuando se encuentra abierto o activado, asimilas la información de forma más fluida (razonable) y rápida, nos encontramos más susceptible a la intuición y la clarividencia, siendo nuestro tercer ojo.

                Por otro lado y a pesar del transcurso de los tiempos, existen costumbres que no se olvidan, especialmente si se ha creado una devoción establecida; generalmente las personas se refugian y buscan apoyo en la religión que practican, así por ejemplo en el catolicismo santos como San José de Cupertino (ayuda a la concentración), Santa Gema Galgani (interceptora de favores) y San Judas Tadeo (ayuda en recuperaciones o segundos intentos), han creado una estrecha relación con los estudios, recibiendo plegarias de miles de personas para sus exámenes.


 










                Como mencionamos anteriormente estas son costumbres “folclóricas” y así como han logrado mantenerse a lo largo del tiempo, hay quienes las han desechado y se afianzan en otras energías, siendo la más recurrente la energía de los amuletos (cualquier objeto con el que la persona se sienta conectada e identificada). Constantemente reafirmamos la teoría que define que los amuletos son materia que se convierte en instrumentos cargados de energía y a medida que pasan los años, se vuelven una pieza fundamental en la vida de las personas, donde cada una deposita en ellos toda su fe y confianza personal e incluso cuando las cosas no andan bien, éste es su refugio.Resultado de imagen de minerales azul violáceo

                Éstos no son una excepción en materia de “Exámenes finales” ya que existe una gran variedad de amuletos que, sin necesidad de que la persona se afiance a él, cumplen con los propósitos sl contar con propiedades naturales positivas para ello; los minerales y cuarzos de color azul violáceo con formas concéntricas como la pirámide en amatista o Lapislázuli, son los más apropiados en este caso, así como los llamadores de ángeles que la persona debe llevar consigo muy cerca del corazón, sin embargo ya hemos comentado en varias oportunidades que somos seres cambiantes y variables, con lo cual, todo es subjetivo; por lo tanto, el amuleto de preferencia para la persona puede ir o estar en cualquier lugar que la persona desee y sienta conexión. Como el ser humano es tan complejo y cambiante, capaz de reinventarse constantemente, hemos diseñado un ritual llamado “Exito en los exámenes finales”, donde lo más importante al realizarlo es encontrarnos receptivos a los cambios positivos, debemos ser conscientes de ello para que sea eficiente.

 Solo necesitas:
-          4 Hojas de laurel
-          Cinta verde
-          Piedra plana o concéntrica de color azul violáceo
-          1 Vela dorada. 

                Debes, en la víspera del examen, colocar las hojas de laurel (secas o frescas) entre tus apuntes en forma de cruz, al día siguiente las coges y escribes tu nombre en cada una de ellas; las hojas las vas a pegar debajo de tu ombligo sujetándolas con un esparadrapo. Cuando estés en el examen coloca tu mano izquierda sobre el ombligo y respira profundamente; es importante que el día del examen alguien encienda por ti la vela dorada y que lleves la piedra cerca del corazón ya sea mediante un colgante o en el bolsillo de la camisa.

                Si deseas conocer más, escucha nuestro segmento donde profundizamos cada uno de los métodos antes mencionados. 


Viktor Cortés

No hay comentarios:

Publicar un comentario