Hoy hablaremos del culto a
las divinidades de origen africano, "Las Franciscas."
Francisca
7 Sayas: Tu nombre en el palo tiene mucha luz y progreso ya que
te denominaban "La conga de batalla". Bruja poderosa, a
quien se le encomendaban fuertes trabajos religiosos los cuales
solventaba rápidamente.
Su carácter era el de una persona
bondadosa, dulce, pero muy justiciera. Ya que le decían la guerrera
valiente porque su temperamento podía variar según las injusticias
que ejecutaran ante sus ojos.
Sanadora con hierbas y maderas
fuertes. Curandera con sus manos y con el poder del agua. Este
espíritu casi siempre pertenece a las comisiones congas, ganguleras
y está muy ligada al mar con tendencia a tener las mismas
características de Yemaya, madre agua. Su representación es el de
una mujer femenina vestida con tela de satén de colores, adornada
con caracoles, también de tela guinga donde predomine el color azul.
Sus ofrendas pueden ser: tabaco, cesta de frutas, agua con azúcar,
dulces, flores rojas o blancas, ron y vino.
Francisca Duarte:
"El anima del Taguapire", le decían "Panchita" o
"Mamá Pancha". Fue una mujer muy responsable, decente, de
carácter también muy recio, y decían que era una excelente
partera. Se dice que murió de paludismo. Enterrada al pie de un
árbol, de ahí que se convierte en el anima del Taguapire y muchas
personas en ese arbusto realizaron y actualmente realizan infinidad
de peticiones, las cuales han sido cumplidas. Ha tenido a lo largo de
los años infinitas apariciones de diferentes maneras pero siempre
ayudando. Gracias a ella, un espíritu de alta luz, muchos devotos
conocieron el amor infinito a la religión y hoy la profesan. Le
llevan sus ofrendas, entre ellas tabaco, aguardiente, velas, y
demuestran ante su tumba toda su fé.
Hoy les dejo una oración
para que le pidan ante una situación que necesiten resolver
ya sea a la 7 Sayas o a la del Taguapire:
“Mujer
sagrada y ejemplo de virtudes entre todas las mujeres. Tú qué
dedicaste tu vida a auxiliar las necesidades de tus semejantes con tu
humilde jícara de agua fresca, con pequeñas pero significativas
provisiones de alimentos para renovar las agotadas fuerzas de los
caminantes con quienes te topabas por los senderos y qué dedicaste
tu vida a transmitir amor por doquier sin pedir a cambio nada. Yo,
(tu nombre completo y fecha de nacimiento), suplico tu ayuda e
iluminación para vencer en este mundo.”
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